Vista nocturna de Uga (Lanzarote)

Quería hacer una imagen nocturna de Uga jugando con las luces de los coches que pasaban por la calle principal. Es lo que se llama fisiograma –en inglés light-painting–, que es como pintar con luz. Requiere un trípode y velocidad de disparo lenta para captar todo el trazo que van haciendo los faros del coche al desplazarse.
El cielo había adquirido el color que a mí me gusta más, azul profundo, y el pueblo empezaba a iluminarse con las lucecitas de las ventanas y los faroles. Eso en las casas encaladas da unas bonitas tonalidades verdosas, rosadas o amarillas, según el foco que ilumine.
Pero faltaba algo muy importante: no había coches circulando en ese momento. El tiempo iba pasando y el cielo iba a oscurecerse demasiado. Tendríamos que hacerlo con nuestro coche. Para esto viene muy bien tener ayudante. Se trataba de trazar el recorrido desde el centro del pueblo, con los faros encendidos, a una velocidad controlada para que el trazo de las luces fuera homogéneo. Un poquito de intermitente al final del trazado para conseguir unas pinceladas anaranjadas… y algo fundamental: tenerlo calculado para que no se termine la exposición antes de que el coche salga de cuadro. No, no. No es tan sencillo. Es probable que haya que repetirlo varias veces.

Panorámica nocturna de Uga (Lanzarote). María Galán/Alamy